Dimensiones y seguridad de la balsa de agua para riego

Esta vez, en Huerto es vida, vamos a hablaros del elemento fundamental de nuestro sistema de riego: la balsa. Vamos a ver sus características y las medidas de seguridad en la balsa de agua. También os describimos más detalles del sistema de bombeo y programación del riego en nuestro artículo “Cómo tener riego a goteo en el huerto”, y en el video de nuestro canal de Youtube.

Nuestra balsa de agua tiene unas dimensiones de unos 8 metros de largo por 5 metros de ancho. Y 2 metros de profundidad, lo que nos da unos 80 metros cúbicos de capacidad. Con esta capacidad, rellenando nuestra balsa 2 ó 3 veces, podemos regar todo el verano un huerto como el nuestro de unos 3000 metros cuadrados.

Para huertos más pequeños, o que no disponen de esta superficie para almacenamiento de agua, existen posibilidades más sencillas, que permiten un plan de riego perfectamente válido. Es posible utilizar contenedores de agua, que suelen ser de unos 1000 litros, que colocados elevados 1 metro o metro y medio, por gravedad pueden hacer perfectamente su función, incluso poniendo algún programador a pilas, es posible programar el riego a goteo del huerto. Se pueden colocar 1 ó 2 depósitos comunicados, incluso se puede incorporar al depósito algún nutriente que se necesite, y se añade al riego por goteo de manera muy sencilla. Este es un sistema que funciona muy bien y es muy sencillo y económico.

Vamos a ver el aspecto de la seguridad, algo que tenemos siempre muy presente en Huerto esVida. Sobre todo disponiendo de una balsa como esta, ya que ha habido accidentes de ahogamientos de personas y animales. La lona que cubre la balsa es completamente impermeable, y cuando está mojada es muy resbaladiza, por lo que si alguien cae al agua, puede acabar agotándose y ahogándose. Primero, la balsa debe estar totalmente vallada y con una puerta cerrada con llave o candado. Por precaución para las personas, pero también, cualquier animal que cayese en la balsa, perros o gatos, no pueden salir y acaban ahogándose. Tenemos también una escala náutica, que es una escalera de cuerda resistente al agua, que llega hasta el fondo de la balsa, por la que podemos salir si caemos en ella. También un flotador náutico, de plástico resistente, que más que para las personas, está pensado para que si un animal cae al agua, pueda agarrarse y mantenerse a flote, hasta que nosotros podamos sacarlo. Además de esto tenemos 2 cuerdas que llegan hasta el fondo, por las que también podemos salir en caso necesario. Por último, sobre todo, asegurarnos que la puerta está siempre cerrada con su candado cuando no estamos en la balsa. Disfrutemos del huerto, pero con seguridad, mucho mejor.